Preguntas en plural, “desaprobado, vuelva en marzo”

¿Cómo te diste cuenta?

¿Cuáles fueron los primeros síntomas?

¿Qué estudios te hicieron para el diagnóstico?

¿Qué te dijo el médico? ¿Cómo te vio?

¿La medicación sentís que te mejora, que te quita los efectos?

¿Es genético? ¿tuviste alguien en tu familia con la misma enfermedad?

¿Se opera el Parkinson?

¿Cómo es que un cable en el cerebro, que estimula ya no con drogas sino con voltaje supervisado y hace descargas sobre dos electrodos colocados allí, te cura de esta enfermedad?

¿no te curará de esto y te provoca algo peor?

¿duele la operación? ¿cuántos días te internan? ¿conoces alguien que se la hayan hecho? ¿le dio resultado?

Y tantas preguntas (en plural) que atemorizan al más valiente.

Preguntas que me llevaron lentamente, sin prisa, pero sin pausa, a una comprensión de lo que sería y provocaría el Parkinson en mí.